Aunque es menos conocida que la trufa negra, trufas negras melanosporum frescas es uno de los hongos más valorados por la alta cocina. Nosotros cocinamos hongos y aprendí a no convencer a nadie porque es algo especial y específico. Los comienzos no fueron sencillos: "Comprar hongos era engorroso, había un solo proveedor en Buenos Aires y nadie tenía el número. Siempre nos gustó trabajar con hongos frescos. Protagonizan una movida trufas de Borgoña la mano del cultivo industrial, aretesanal y con la trufera más grande de América Latina. Es muy importante aportar a la salud de la gente", asegura, y suena como una firme declaración de principios. Históricamente utilizados como un acompañamiento menor en las comidas, hoy, de la mano de la preocupación por una alimentación más saludable y cierta sofisticación gourmet, los hongos están ganando terreno en todos los aspectos.