Como hemos comentado, si bien las trufas no resultan tóxicas para los perros, sí que pueden ser difíciles de digerir para ellos. Como resultado, los rendimientos del cultivo de trufas siguen siendo inciertos y puede resultar en una inversión arriesgada para los agricultores. Se deben proteger los plantones con tubos de plástico translúcido semirrígido para su protección frente a inclemencias del tiempo y la protección frente al ganado y otros enemigos potenciales, como los roedores y jabalíes. C., cuando hacían referencia a los hábitos alimenticios de sus enemigos mesopotámicos.3 Otros importantes registros antiguos incluyen los escritos de Teofrasto, un filósofo griego del siglo IV a. Esta técnica se registró por primera vez en 1969.