Las trufas fructifican bajo tierra y únicamente se puede saber dónde están por medio de los llamados «quemados» o zonas sin vegetación que indican que en esa zona puede haber trufas. Una vez que has encontrado tus trufas, es importante saber cómo conservarlas adecuadamente. En vez de un concurso de reinas y doncellas caballerescas, donde el gran don Quijote hubiera resplandecido por la cortesía, están allí cuatro locas que le toman, le hacen dar vueltas, le pisan, le cansan, le marean, le botan y le dejan arrastrando en tierra.