Estas trufas de chocolate fáciles de hacer con migas de bizcocho son unos regalos preciosos para ocasiones como San Valentín, Navidad, el Día de la Madre, el Día del Padre y Pascua, o sírvelas como un capricho especial para cualquier ocasión. Los esfuerzos realizados en Italia durante décadas para obtenerla a partir de cultivo, no han dado los resultados previstos, siendo pues una variedad más difícil para el cultivo que la trufa negra invernal. La manera de apreciar mejor su sabor es comiéndola en fresco, aunque es práctica habitual usarla para trufar determinados productos, como los huevos, aceite, vinagre, licores, etc. Es mejor cocinarlo con comidas que tengan algo de grasa de manera que sus aromas se mantengan mezclados con la misma (sopas con leche, estofados de carne, bechamel, verduras con carne, etc). Es un artículo largo que ha requerido de mucha documentación y paciencia.