El cultivo de la trufa, conocido como truficultura, ha ganado popularidad en los últimos años debido a la alta demanda y el agotamiento de las trufas silvestres. Gracias a esta extraordinaria capacidad, los perros se convierten en rastreadores ideales para diversas tareas, como detectar sustancias ilegales en aeropuertos o buscar víctimas en situaciones de desastre. Los perros con orejas largas y caídas suelen tener un olfato excepcional. Ante el inicio de la temporada de búsqueda de verano, que en algunas comunidades estaba prevista para el día uno de este mes, o la de invierno, que en 2019 comenzó el 15 de noviembre, el equipo de Detectatrufa está preparando ya los perros. Sin embargo, una vez que tengas una buena red de contactos y hayas establecido una presencia en el mercado, puedes ganar buen dinero vendiendo trufa blanca durante la temporada de cosecha. Como siempre, jamás estábamos libres de dificultades; esta vez era la falta de embarcacion.